Ejes estratégicos

Ofrecer oportunidades económicas en Castilla y León para generar, atraer, fidelizar y vincular el talento. En este sentido, las políticas económica, fiscal, industrial y de innovación se configuran como elementos clave para hacer de Castilla y León una tierra atractiva para trabajar y vivir en ella.

De este modo, las medidas aplicadas en torno a estas políticas se configuran como instrumentos esenciales para incorporar el talento como factor de competitividad y transformación empresarial en el modelo productivo de Castilla y León, mediante la creación de nuevo empleo de calidad y las mejoras sustanciales de las características del empleo actual.

La consolidación de los sectores estratégicos y la potenciación de nuevos sectores, y nichos de creación de empleo —que conformarán el empleo del mañana— debe tomarse también como un elemento clave de este eje estratégico. En concreto, favorecer el entorno empresarial y las condiciones facilitadoras para el desarrollo de los negocios, en particular, el apoyo al emprendimiento y al crecimiento de las pequeñas y medianas empresas, como grandes empleadoras y actores necesarios en el tejido productivo de Castilla y León.

Asimismo, el apoyo económico a los jóvenes en las primeras etapas de su vida profesional, tanto a aquellos que decidan trabajar por cuenta ajena como a los que creen una empresa, es otro elemento central, que debe materializarse en instrumentos públicos y privados que atraigan y fidelicen a los jóvenes en esa etapa crítica de su vida personal y profesional, y que haga de Castilla y León un lugar adecuado para los jóvenes en el que trabajar y vivir.

Establecer, por tanto, unas condiciones favorables para promover un entorno económico adecuado es clave para consolidar un ecosistema de talento en Castilla y León. Esta línea de acción acompaña y complementa las acciones establecidas para ello en la Estrategia de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente (RIS3) de Castilla y León para el periodo 2021-2027, con el objetivo de avanzar en la transformación económica de nuestra economía y nuestra sociedad.

La reducción de costes de transacción, económicos y administrativos para promover la inversión empresarial, la internacionalización de las empresas, la inversión exterior, la I+D+I, el acceso a suelo industrial o facilitar la creación de empresas, son acciones necesarias para crear las condiciones favorables al desarrollo del talento en Castilla y León.

Así, no sólo hay que poner el foco en desarrollar el tejido empresarial actual y en promover la especialización inteligente, sino también en apoyar la creación de empresas innovadoras de alto valor añadido y generadoras de empleo cualificado que impulsen el crecimiento económico de Castilla y León. Potenciar el ecosistema innovador de la comunidad como palanca de transformación resulta clave tanto para generar y atraer talento, como para vincularlo y fidelizarlo a Castilla y León.

Del mismo modo, impulsar el tejido empresarial rural es un factor clave para la transformación productiva y la generación de empleo en la comunidad. En este sentido, favorecer la inserción de talento en proyectos empresariales en el ámbito rural es un elemento central en la fidelización y vinculación del talento al territorio, poniendo en valor las oportunidades existentes para contribuir a desarrollar una vida plena en Castilla y León.

Para el tejido empresarial y para el crecimiento económico de Castilla y León es fundamental que las empresas puedan contar con las personas y los perfiles profesionales que se necesitan actualmente y también con los que se vayan a necesitar en el futuro.

El objetivo es abordar el desajuste de talento que se manifiesta en dificultades para encontrar los profesionales que se necesitan. Esta situación se puede producir por razones formativas, por fuga de talento, por el poco atractivo de ciertos sectores o por la falta de relevo generacional, entre otras causas.

También en los próximos años se prevé que se creen nuevas oportunidades de empleo hasta ahora inexistentes y que algunos puestos de trabajo se modifiquen sustancialmente o desaparezcan.

Por ello, seguir generando talento en Castilla y León, así como vincular el talento generado por el sistema educativo de Castilla y León resulta un eje prioritario para la transformación de la economía.

También es necesario posicionar el talento senior como activo dentro del tejido empresarial y de las organizaciones que, junto al talento joven, resulta clave en la transformación económica, aportando su experiencia y sus capacidades para generar valor añadido.

Potenciar y poner en valor la excelencia en educación, empresarial y de calidad de vida en Castilla y León es otro aspecto clave para la vinculación del talento a la comunidad. Por un lado, la excelencia en educación a todos los niveles: educación primaria, secundaria, formación profesional, universitaria, postgrado y la desarrollada por las empresas (formación continua). Por otro, la excelencia de las empresas de Castilla y León, líderes en sus campos respectivos y con capacidad para ofrecer un proyecto profesional con garantías para el talento joven, y la excelencia de nuevas empresas creadas en la comunidad, innovadoras y de rápido crecimiento, fuente de empleo cualificado.

Las transformaciones sociales y los cambios que se han venido produciendo en los últimos años han dado lugar a que las nuevas generaciones evalúen con criterios diferentes las propuestas de empleo y su carrera profesional. Por ello las empresas deben adaptar sus organizaciones hacia nuevas formas de trabajo y nuevas orientaciones de valor para sus trabajadores, a fin de resultar atractivas entre los jóvenes.

En esta línea de actuación también es fundamental que las empresas avancen en la gestión por competencias y en la profesionalización de la gestión del talento, ya que de esta forma podrán tener mejores herramientas para gestionar a las personas, conocer sus necesidades y diseñar adecuadamente la política de recursos humanos de la empresa, abordando por ejemplo los incentivos o los itinerarios de desarrollo de cada persona, con las que atraer y fidelizar el talento en las organizaciones.

Dar visibilidad a todos estos aspectos a través de una política activa de información y comunicación es fundamental para poner en conocimiento todas las bondades existentes en Castilla y León: la calidad de vida, las oportunidades económicas y profesionales, entre otras.

Para alcanzar los objetivos de la Estrategia de Talento 2031, es necesario el compromiso conjunto del tejido empresarial y otros actores de la sociedad civil para entender la importancia de la necesidad de atraer, vincular y fidelizar talento como palanca de competitividad y transformación económica, lo que implica conceptualizar a toda la sociedad como parte activa de este objetivo.

Es misión de todos conseguir los objetivos fijados para la atracción y vinculación del talento en la comunidad. En este sentido, además de la Junta de Castilla y León, las instituciones presentes en el territorio, el tejido empresarial y otras organizaciones de la sociedad civil son necesarias para enfrentar con éxito el reto del talento.

Incentivar que Castilla y León sea considerada un polo de atracción de talento exterior, referido a las personas jóvenes y con experiencia y de alta cualificación para su inserción en el tejido productivo de la comunidad, así como atraer empresas, startup y grandes corporaciones, para desempeñar su actividad económica como fuente generadora de empleo y oportunidades.

Promover un ecosistema dinámico de innovación en materia de talento en el que formen parte agentes de la cuádruple hélice: administración pública, academia, tejido empresarial y sociedad civil, y donde se visibilicen las oportunidades y se lleven a cabo acciones dinámicas interactivas entre los agentes que sitúen a Castilla y León como un polo de referencia en talento.